Posiblemente eres de las personas que aman comer dulce. Cuando tienes antojos, piensas en un pastel de chocolate, o una malteada de fresa con crema chantilly, y por qué no unas donas al estilo de Homero Simpson. O de pronto, eres de las personas que les gusta el café con 2 cucharaditas de azúcar. Si es así, esta información te interesa.
Se ha dicho durante mucho tiempo, que la grasa es el enemigo que debe ser derrotado, en la guerra contra la obesidad. Sin embargo, en los últimos años, varios estudios se han centrado en el impacto del azúcar en la salud, muchos investigadores creen que es más peligrosa que la grasa. ¡Algunos llegan incluso a compararlo con un veneno!
La palabra es un poco fuerte, pero de hecho, consumir demasiado azúcar tendría efectos adversos sobre la resistencia a la insulina, la hipertensión, la circunferencia de la cintura, la obesidad e incluso la diabetes. En general, estos hallazgos se han demostrado en animales o en estudios observacionales.
Los azúcares son carbohidratos simples, es decir, están compuestos de pocas moléculas. Los monosacáridos son azúcares que contienen sólo una molécula (por ejemplo, fructosa, glucosa). Los disacáridos son azúcares que contienen dos moléculas (por ejemplo, sacarosa, lactosa). El azúcar se encuentra naturalmente en pocos alimentos: frutas, leche, miel, jarabe de arce … Así, es comprensible que antes de inventar el proceso para extraer el azúcar (sacarosa) de las cañas de azúcar o remolacha, los seres humanos la consumían muy poco.
¿Consumimos demasiado azúcar?
En los últimos 50 años, el consumo global de azúcar se ha triplicado. ¡No pienses que es porque la gente consume más frutas que antes! En su lugar, los alimentos que contienen azúcares natural se consumen poco.
Las nuevas tecnologías han permitido el desarrollo de otra forma de azúcar, que se ha vuelto muy popular debido a su bajo costo: el jarabe de glucosa – fructosa.
Se estima que el 50% de la ingesta dietética de azúcares añadidos, proviene de sacarosa, y que el 50% proviene del jarabe de glucosa-fructosa. Las principales fuentes de estos azúcares añadidos son los refrescos y otras bebidas azucaradas.
7 cosas peligrosas que le pasan a tu cuerpo al consumir mucha azúcar
1 – Comienzas a sufrir de ansiedad
Se libera dopamina que es calmada por el consumo de azúcar, y cuando no la consumes, comienzas a ponerte ansioso, no sólo por los problemas de tu día a día, sino sin ninguna razón aparente.
2 – Te causa adicción
Y cómo no puedes calmarte, lo que haces es consumir más azúcar, ya sea en forma de dulces, pasteles, galletas, etc. Y ese consumo de azúcar, va subiendo sin que te des cuenta, hasta que te vuelves dependiente de su consumo.
3 – Tu cerebro no funciona adecuadamente
El consumo de azúcares no naturales, no es una alimentación adecuada, por lo tanto, no llegan los nutrientes a todos los tejidos. Eso hace que disminuya la oxigenación en la sangre, por lo tanto, no llega oxígeno al cerebro. Como consecuencia, tienes falta de concentración y mala memoria.
4 – Subes de peso
El azúcar se convierte en grasa, y esto en aumento de peso, pero la principal zona afectada es el abdomen. Esto sucede porque el metabolismo se hace lento con el consumo excesivo de azúcar.
5 – Los dientes se dañan
El azúcar hace que las bacterias en la boca producen un ácido que daña los dientes. Entre más azúcar consumes, más se dañan los dientes.
6 – La piel se deteriora
Como ya dijimos, el azúcar se vuelve en grasa, por lo tanto la piel se llena de acné. También daña el colágeno y la producción de elastina, así que produce envejecimiento prematuro. También debilita el sistema inmunitario, que la hace propensa a infecciones.
7 – Aumenta el riesgo de sufrir enfermedades
No solamente aumenta los niveles de glucosa lo que lleva a sufrir de Diabetes. Entre otras enfermedades causa: problemas en el tracto gastrointestinal como aumento de la acidez, indigestión, colitis ulcerosa. También causa: piedras en la vesícula, apendicitis, hemorroides, várices, problemas cardiacos, enfisema, parkinson, y muchas más.
Recomendación
- Por eso lo mejor es buscar las fuentes naturales de azúcar, come frutas y verduras.
- Limitar el consumo de azúcar a menos del 10% de la ingesta calórica normal.
- Recuerda hacer ejercicio, consumir agua y una buena dieta.
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